Desde el sábado a la noche, domingo a la mañana, que estoy con una feroz gripe. Como no podía ser de otra manera, tiene que coincidirme justo justo con la ola polar!... Que genial! Hace cuatro días que veo el sol, sola y únicamente, por la ventana.
Vivir encerrada en esta casa en un completo embole, pero bueno, trate de ponerme a estudiar, lo cual me costó bastante debo decir. Pero más que nada mate tiempo haciendo lo que más me gusta y tenia un poco abandonado, Diseñar!.
Si bien no comencé nada nuevo, me dedique a customizar cosas que ya tenia: me estoy bordando un blazer viejito, como para renovarlo, y le pegue unas cintas elastizadas a un suéter para que deje de ser tan básico (cuando los use subo fotos).
Por otro lado, estos días también me sirvieron para pasar más tiempo con mis mascotitas, las cuales no me dieron ni un tranco de bola. Se pasan el día durmiendo, hasta las 7 de la tarde no se ve movimiento animal en esta casa!... Son un desastreeee... y las envidio!... Quiero vivir una semanita como ellas!!!!....
Por otro lado, el Rata, este pibe está cada día más tarado!... El peor día de la gripe fue el lunes, me sentía completamente mal, por lo cual me pase la mayor parte del tiempo en cama, con ganas de que me atiendan un ratito. Todo el día esperé con ansias la llegada de la tarde, para que viniera el rata a mimarme un rato, y para que aunque sea, me alcanzara un té.
Cuando llego la hora esperada, me aviso que había vuelto del trabajo... y.... se durmió!... Si, el muy salame se durmió en su casa, abrazado con su perra. Mientras yo, acá, con la nariz a la miseria, con una granja completa y ganas 0 de levantarme, tuve que arreglármelas solita, porque mi novio dormía panchamente en su casa!...
Aaawwwww... por Dios!!!... Para que quiero novio si no me sirve para nada?? No me trae un te cuando me siento mal, no me trae un chocolate de regalo y nisiquiera se ofrece a hacer un mandado!!!!...
Que estoy haciendo que no lo mando a la merda todavía??? De donde saqué tanta paciencia?? Desde cuando???
Bueno, nose, espero la gripe se me pase rápido y con ella se valla también la ola polar!!!...
Capas capas, si tengo mucha suerte, esta noche me llevan al cine (me llevan, como si tuviera 3 años), vamos al cine (paga él!!!!).
Abríguense y tápense el pechito (como dicen las abuelas)
Besotes y hasta la próxima!...
Noelita!...
jueves, 7 de junio de 2012
viernes, 1 de junio de 2012
Y con ustedes.... "El Rata".
Rata, si, rata.... extremadamente rata!... Ese es mi novio!... Lo quiero, no lo voy a negar, pero es rata!!!
Tenemos una muy linda relación, es compañero, (casi) atento y vive pendiente de mi, pero, no le pidamos un peso porque es imposible. Acá les dejo algunas inolvidables anécdotas:
Hacia poco salíamos, un mes más o menos, y, como él no había ido nunca, se nos ocurre ir a mirar una peli en 3D. Salimos de casa en taxi, y al llegar a la puerta del shopping (muy mala costumbre de mi parte), saco la billetera y pago el viaje. El pibe no se inmutó para nada.
Sacamos las entradas, el costo era de $60 en total (pochoclos, gaseosa y/o chocolates, ni pensarlo!). Entonces, para ser condescendiente o nose, esa maldita costumbre que tengo de no poder dejar la billetera en su lugar, saco $50 y se los doy para que se cobre mi entrada. No me dió vuelto!... Pueden creer q no me dio el vueltoooo??!!!!!...
Resultado: la salida al cine le costo exactamente $10 porque volvimos caminando.
El día de los enamorados fue otro increíble suceso o en realidad fueron otros sucesos. Previniendo no quedar mal, ante la llegada de su regalo y yo con las manos vacías, disidí comprarle algún presente, no muy caro porque mi presupuesto estaba bastante acotado, pero tampoco un llavero destapador.
Pensé y busque en mi archivo de recuerdos, alguna conversación que me diera una idea, una pista o alguna noción de que andaba queriendo o necesitando, con lo cual llegue a la conclusión que un cinto era la mejor opción. Le compré un cinto de cuero de vaca con pelo trenzado, sencillo pero lindo.
Por si se le ocurría no comprarme nada, esa misma noche (un par de días antes del 14 de febrero), le avisé "en tono misterioso" que ya tenia su regalo, pero que debía esperar hasta el 14.
Ese día llegó y como vino a cenar a casa la noche previa, cuando llegaron las 12 le di su regalo, me respondió como cumpleañero que recibe un presente sin tener la necesidad de dar uno a cambio, al muy caradura no se le movió un pelo, ni un poquito de vergüenza por no darme mi regalo. Pero, aunque ya me lo veía venir, tenia todo un día por delante en el cual podía sorprenderme con algo.
Al otro día, a la tarde, me escribe para que lo acompañe a ver un auto que se quería comprar. Me propuse ponerme linda, sin exagerar mucho, pero no quería que una invitación a cenar me tome de imprevisto. Así que elegí un vestidito sencillo pero lindo, unas sandalias, un poco de make up y un peinado prolijo. Y de esta manera, arreglada para mi "futura invitación" me senté a esperar que llegara.
Paso una hora, dos, y contando... Ya cansada de esperarlo le escribo a ver que pasaba, y me responde que ya venia. Fue peor, mi mente voló a mil por hora, pensando que se había atrasado buscando un regalo para mi!... Ya lo imaginaba, con un gran oso de peluche, flores y bombones. Con un lindo vestido y un par de zapatos hermosos. Mil imágenes hermosas pasaron por mi cabeza hasta el momento en que sonó en timbre.
Bajo emocionada, a buscar "mi regalo" y me encuentro con el rata vestido completamente de entre casa, de remera vieja, bermuda y ojotas, con una cara de dormido terrible!...
En ese momento me di cuenta que mi idea era completamente irracional, en vez de andar buscándome un super regalo, se había quedado dormido!
Salimos con destino incierto, pero yo ya estaba de bastante mal humor, lo del auto era real, y luego de eso, me llevo a tomar una coca a un drugstore.
Con todo esto, mi día de San Valentin se había convertido en una porquería total, pero todavía me quedaba una chance, una última oportunidad. Que me invitara a cenar a algún lindo lugar.
Pero tampoco tuve suerte, terminamos comprando sandwiches y comiendo en casa. Pero como si todo eso fuera poco, cuando tuvimos que pagar en el bar, él puso $50, el resto lo tuve que pagar yo!...
Como estas, hay mil historias más, pero me pasaría días escribiendo. Para que se den una idea, les cuento que, hasta el día de hoy no me ha hecho ni un solo regalo, salvo algún alfajor que le pedí que me traiga del quiosco cuando va a comprar puchos!....
Espero que tengan un hermoso finde!...
Hasta la semana que vieneee!!!! :)
Noelita!.
Tenemos una muy linda relación, es compañero, (casi) atento y vive pendiente de mi, pero, no le pidamos un peso porque es imposible. Acá les dejo algunas inolvidables anécdotas:
Hacia poco salíamos, un mes más o menos, y, como él no había ido nunca, se nos ocurre ir a mirar una peli en 3D. Salimos de casa en taxi, y al llegar a la puerta del shopping (muy mala costumbre de mi parte), saco la billetera y pago el viaje. El pibe no se inmutó para nada.
Sacamos las entradas, el costo era de $60 en total (pochoclos, gaseosa y/o chocolates, ni pensarlo!). Entonces, para ser condescendiente o nose, esa maldita costumbre que tengo de no poder dejar la billetera en su lugar, saco $50 y se los doy para que se cobre mi entrada. No me dió vuelto!... Pueden creer q no me dio el vueltoooo??!!!!!...
Resultado: la salida al cine le costo exactamente $10 porque volvimos caminando.
El día de los enamorados fue otro increíble suceso o en realidad fueron otros sucesos. Previniendo no quedar mal, ante la llegada de su regalo y yo con las manos vacías, disidí comprarle algún presente, no muy caro porque mi presupuesto estaba bastante acotado, pero tampoco un llavero destapador.
Pensé y busque en mi archivo de recuerdos, alguna conversación que me diera una idea, una pista o alguna noción de que andaba queriendo o necesitando, con lo cual llegue a la conclusión que un cinto era la mejor opción. Le compré un cinto de cuero de vaca con pelo trenzado, sencillo pero lindo.
Por si se le ocurría no comprarme nada, esa misma noche (un par de días antes del 14 de febrero), le avisé "en tono misterioso" que ya tenia su regalo, pero que debía esperar hasta el 14.
Ese día llegó y como vino a cenar a casa la noche previa, cuando llegaron las 12 le di su regalo, me respondió como cumpleañero que recibe un presente sin tener la necesidad de dar uno a cambio, al muy caradura no se le movió un pelo, ni un poquito de vergüenza por no darme mi regalo. Pero, aunque ya me lo veía venir, tenia todo un día por delante en el cual podía sorprenderme con algo.
Al otro día, a la tarde, me escribe para que lo acompañe a ver un auto que se quería comprar. Me propuse ponerme linda, sin exagerar mucho, pero no quería que una invitación a cenar me tome de imprevisto. Así que elegí un vestidito sencillo pero lindo, unas sandalias, un poco de make up y un peinado prolijo. Y de esta manera, arreglada para mi "futura invitación" me senté a esperar que llegara.
Paso una hora, dos, y contando... Ya cansada de esperarlo le escribo a ver que pasaba, y me responde que ya venia. Fue peor, mi mente voló a mil por hora, pensando que se había atrasado buscando un regalo para mi!... Ya lo imaginaba, con un gran oso de peluche, flores y bombones. Con un lindo vestido y un par de zapatos hermosos. Mil imágenes hermosas pasaron por mi cabeza hasta el momento en que sonó en timbre.
Bajo emocionada, a buscar "mi regalo" y me encuentro con el rata vestido completamente de entre casa, de remera vieja, bermuda y ojotas, con una cara de dormido terrible!...
En ese momento me di cuenta que mi idea era completamente irracional, en vez de andar buscándome un super regalo, se había quedado dormido!
Salimos con destino incierto, pero yo ya estaba de bastante mal humor, lo del auto era real, y luego de eso, me llevo a tomar una coca a un drugstore.
Con todo esto, mi día de San Valentin se había convertido en una porquería total, pero todavía me quedaba una chance, una última oportunidad. Que me invitara a cenar a algún lindo lugar.
Pero tampoco tuve suerte, terminamos comprando sandwiches y comiendo en casa. Pero como si todo eso fuera poco, cuando tuvimos que pagar en el bar, él puso $50, el resto lo tuve que pagar yo!...
Como estas, hay mil historias más, pero me pasaría días escribiendo. Para que se den una idea, les cuento que, hasta el día de hoy no me ha hecho ni un solo regalo, salvo algún alfajor que le pedí que me traiga del quiosco cuando va a comprar puchos!....
Espero que tengan un hermoso finde!...
Hasta la semana que vieneee!!!! :)
Noelita!.
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